Hoy voy a hablaros de este tema que parece una leyenda
lectoril y sin embargo, si te pasa, se puede convertir en tu pesadilla.
El tema no me ha venido por casualidad a la cabeza, sino
porque vi no hace mucho el vídeo en que Sebas, El coleccionista de mundos, se atrevía a acometerlo. Y la verdad,
lo recomiendo. Lo dejo aquí:
La verdad es que también estoy cerca de que me dé un nuevo
bloqueo lector, o como lo he llamado siempre antes de conocer esta forma de
llamarlo, un bajón de lectura. Digo
que estoy cerca porque después de tantas veces creo que ya reconozco los
síntomas de un posible-futuro-cercano bajón de lectura en mi vida. Por otra
parte, lo bueno de haber sufrido ya unos cuantos es que le vas cogiendo el
tranquillo y te lo tomas con más calma.
Lo primero que te tiene que quedar claro si es la primera
vez que te pasa, como bien dice Sebas (más o menos) y estoy de acuerdo, es que
no te tienes que sentir un lector de pena, un lector que ha caído bajo, que ha
fallado y ya no puede considerarse a sí mismo un buen lector nunca más. Piensa
en todos los libros que leíste antes. ¿Los habrías leído si fueras un mal
lector? ¿Habrías cogido siquiera uno? Incluso si acabas de empezar a meterte en
el mundillo de la lectura cuando te ha dado el bajón. ¿Alguien te obligó a
hacerlo? ¿No empezaste porque querías hacerlo? ¿Crees que alguien que no
valiera para lector si quiera se lo plantearía, intentarlo? Alguien que se lo
ha propuesto ya es alguien que puede conseguirlo. Y piensa que hasta los
lectores más voraces han tenido o tienen de vez en cuando bloqueos en los que
no les apetece leer nada. Personalmente creo que no hay nadie a quien no le
haya pasado o le vaya a pasar alguna vez.
Recuerdo que cuando me pasó la primera vez me sentía así, me
dio un bajón tremendo de ánimo a causa del bajón de lectura, porque pensaba
cosas como que eso no podía estar pasándome a mí (había oído que a otros les
pasaba, pero a mí no me pasaría nunca, o eso pensaba), que no era tan buena
lectora como siempre creí, que qué iba a hacer… Llevaba leyendo desde que
aprendí, a los seis años. Y podías verme a menudo, semana sí, semana también,
cruzando la calle con una pila de libros en los brazos. Así que cuando me pasó
el primer bloqueo lector, sobre los doce-trece años, mi mundo se vino abajo.
Sin embargo, no mucho tiempo después (quizás unos meses),
salí de ese bache por casualidad, y ahí me di cuenta de que tenía remedio,
cuando hasta el momento creía que era el fin para mí como lectora, que jamás
saldría de eso. Y ya veis, después de aquella vez he tenido tanto nuevos
bajones como subidas grandes como antes las había tenido, en que no paraba de
devorar un libro tras otro. Por lo tanto respondo desde ya posibles dudas que
os puedan surgir si es la primera vez:
- ¿Tiene cura? SÍ
- ¿Puede volver a pasarme? SÍ
- ¿Es el fin? NO, SIEMPRE ES TEMPORAL
- ¿Volveré a ser el que era/ la que era? PUEDES SER HASTA
MEJOR LECTOR AÚN (todo depende de ti).
- ¿Seré algún día un buen lector? (En el caso de los que
empiezan) SÍ, si aunque tengas paradas, vuelves a intentarlo todas las veces
que haga falta. Un lector no nace: se hace. Ni siquiera los que leen desde que
aprendieron (como en mi caso) han amado la lectura nada más ver la primeras
letras, como si fuera algo que sucede sí o sí con padres/antepasados/familia
lectora (ya te digo yo que no). En esto se aplica la misma regla que para otras
cosas: quién algo quiere, algo le cuesta. O una frase que me encanta y creo que
es una verdad como un templo: Lo que de verdad vale la pena en la vida, nunca
es gratis (o cuesta dinero, o tiempo, o esfuerzo, o sacrificios varios o todo
ello). Así que no te rindas, porque si cuesta, es que el esfuerzo valdrá la
pena.
Dicho todo esto, voy a pasar a lo que más me interesaba
hacer en esta entrada: dejaros una lista de consejos/tips/ideas para los parones/bloqueos/bajones
lectores o como queráis llamarlos.
Como hay un montón de consejos sobre esto en la web, mi
intención es simplemente hacer una recopilación de ellos en mis palabras (todos-todos
no, porque algunos no me parecían muy allá y otros os dejaré otros blogs al
final que me parece que los cuentan mejor que yo) para tener una lista lo más
larga posible que pueda serviros a la mayoría, ya que lo que no les funciona a
unos, les funciona a otros y viceversa. Ninguna idea es infalible, pero
cualquiera puede funcionar, todo es cuestión de probar hasta que lo consigáis:
1. El más manido: Dejar que el tiempo pase hasta que te
vuelvan las ganas.
No se dice a menudo por nada: funciona. El que ama leer
termina volviendo a ello tarde o temprano, el cuerpo se lo pide. Así que una
idea muy buena es hacer cualquier cosa menos leer: privarte de la lectura para
que te dé el mono.
Este puedo decir que a mí me ha funcionado. Lo malo o la
pega que tiene, es que puede pasar mucho tiempo hasta que ocurra el milagro y a
lo mejor no quieres esperar tanto. Pero si no tienes prisa, éste es bueno y
"natural" xD (También es bueno y preferible, en el caso de los que no
tienen pasión por leer, a que se obliguen y terminen teniendo más apatía o
desinterés del que ya tenían hacia la lectura. Los gustos no se fuerzan: se
disfrutan).
2. Ir sobre seguro: leer algo que ya sepas cómo es y sepas
que te encanta.
El último libro que te apasionó; o el primero, el que hizo
que le cogieras gusto a leer; o uno de los libros que nunca te cansas de releer;
o uno que querías releer y nunca encontrabas el momento; o un libro de un autor
que nunca te ha defraudado o que te enciende y emociona, tanto nuevo como
viejo… En fin, ¿por qué no fiarnos de libros que nos han llegado hondo o que
sabemos que hay muchas probabilidades de que nos lleguen hondo (en el caso del
mismo autor, distinto libro)?
3. Parecido al apartado anterior: leer un libro o varios de
un género que te chifle.
Si ha funcionado antes, ¿por qué no va a funcionar ahora?
4. El contrario que el anterior: leer un libro o varios de
un género o tipo que desconozcas y querías probar, por cambiar (o que conozcas
pero no leas mucho ahora).
Esta es una solución muy aconsejable sobre todo si llevas
una época leyendo libros muy similares: todo trilogías distópicas (o
simplemente trilogías); todo de romances; todo en plan realista; todo en plan
fantástico; etc. A lo mejor lo que simplemente te pasa es que te has saturado
de cierto tipo de historias. Así que déjalas aparcadas, incluso aunque te
atraigan por la trama o lo que sea y haz un esfuerzo por buscar cosas
distintas. Tu mente agradecerá el cambio (y sobre todo dejar de ver semejanzas
a diestro y siniestro xP).
5. Date un capricho y lee uno que lleves muchísimo tiempo
deseando leer.
Esto personalmente no lo he probado para un bloqueo aún,
pero tiene pinta de funcionar 100% (ya sólo pensar en hacer eso realidad dan
ganas).
6. No te obligues a leer algo que no te gusta.
Muchas veces porque nos hemos puesto alguna meta específica
(leer cierto género, a cierto autor, etc) o simplemente porque nos parece de
mal lector no terminar un libro una vez que lo empezamos, nos tragamos una
historia o varias seguidas que nos dejan con mal sabor de boca y cada vez
tenemos menos ganas de leer.
No te hagas eso. La lectura es un placer, no una tortura.
7. No te sobrecargues con tus lecturas.
También a veces lo que hacemos es querer leernos un montón
de una sentada y no damos abasto y nos estresamos. O queremos hacer milagros y
compaginar la lectura de libros enormes (o más cortos pero muchos) con
obligaciones que también nos saturan mental o emocionalmente (como trabajos o
exámenes de clase).
En este último caso de compaginar varias cosas a la vez,
recomiendo que si estás muy estresado/a ya de por sí, o bien dejes aparcada la
lectura un poco o bien cojas libros muy ligeros y sencillos de leer, que sean
como algo refrescante en tu rutina y no una carga más.
8. Si quieres leer un clásico, que sea un clásico adaptado o
de fácil lectura.
He visto en otros blogs que desaconsejan leer libros
clásicos porque se hacen pesados de leer al estar escritos de una forma antigua
o con lenguaje y vocabulario del año catapum. Estoy de acuerdo con el motivo,
pero no me gusta la idea. A mí me ha funcionado a veces leer libros clásicos
porque se alejan de todo a lo que solemos estar acostumbrados (sobre todo si
sois como yo de leer mucha literatura juvenil actual).
Pero, eso sí: en vez de clásicos íntegros, te coges una
adaptación (recomiendo con ilustraciones y notas a pie de página para entender
mejor las cosas típicas de la época) y va como la seda. Garantizado: puede
resultar una lectura fresca. Es más, incluso puede que te enganches a ese tipo
de lecturas más de lo que imaginabas.
9. Ponte con algo distinto a los libros o a los libros
estilo novela, etc (o cambia el formato)
Lee revistas, periódicos, ebook o papel (según a lo que
estés acostumbrado/a, cambialo por lo otro), novelas gráficas o libros
ilustrados, cómics o mangas, poesías, cuentos, libros sobre ciencia, cocina, la
naturaleza, otros países y culturas, música, chistes, cine, etc. Cosas que no
suelas leer y que querías probar o te den curiosidad.
10. Cambia el idioma
A veces el simple hecho de intentar entender un nuevo idioma
puede incentivarnos a leer (la verdad es que en un bloqueo todavía no lo he
probado, pero sí que leer en inglés por ejemplo me ha hecho la lectura amena a
veces, sobretodo con libros cortos y sencillos en inglés).
11. Date un tiempo entre libro y libro. Y cuando estés
leyendo uno, no corras
Date tiempo para revivir la historia del último que te has
leído y reflexionar un poco cuando lo acabes (si te ha gustado claro) y también
para que tu mente descanse (esto te lo está pidiendo tu cuerpo, aunque tú no le
hagas caso :P). Y cuando empieces uno o estés en medio de uno, leelo con calma,
sin prisas. Si te aceleras con todos, acabas con un cacao en la cabeza y
sobretodo, los disfrutas menos.
Lee al ritmo en que te sientas más a gusto y no
forzado ni de los nervios o estresado. El ritmo que tu mente te pide y que tú
sabes que agradeces o añoras y en el que mejor lo vives.
12. Aspectos físicos: Cambia el lugar, la iluminación, el
sonido…
A veces lo que sucede es que no nos hemos dado cuenta de que
siempre leemos en un sitio que nos dificulta la lectura o que nos da pereza
leer en él.
Por ejemplo, a lo mejor leemos en un lugar con una
iluminación que nos da sueño o nos cansa la vista. O leemos en un sitio en que
hay jaleo a menudo y nos desconcentramos (o nos va leer en sitios con
movimiento y leemos en absoluto silencio pensando que es lo mejor porque a
otros les funciona, pero no todos tenemos por qué funcionar igual). O
simplemente nuestra vista no da más de sí y necesitamos dejarla descansar, en
cuyo caso podemos probar con los audiolibros o pedirle a alguien (un amigo
generoso xP) que nos lea.
O simplemente necesitamos un cambio, así que a probar sitios
nuevos para leer: la biblioteca, una terraza, un bar o cafetería, el autobús,
el metro, una estación, la calle, un parque, … el comedor, la cocina, el
balcón, tu habitación (sí, hay seres raros como yo que no pisan mucho su habitación),
… o un rincón que sólo tú y unos pocos privilegiados conozcan xD (en serio,
cualquier sitio que se te pueda ocurrir, no tiene por qué ser el que dicen
todos siempre).
13. Consejos que a lo mejor no te sacan directamente de un
bajón, pero te reaniman el ansia lectora un poquitín (por lo menos en mi
experiencia)
- Descubre (o redescubre) la aventura de encontrar uno del
que no sepas nada. Nos hemos acostumbrado tanto a mirar reseñas y demás, que se
nos ha olvidado el placer que sentíamos cuando descubríamos un libro
inexplorado en una estantería anodina.
- Habla de libros con otros, de lecturas pasadas o por leer
o de la propia lectura. Estas conversaciones muchas veces nos crean las ganas
de ponernos a leer algo específico o nos recuerdan lo que nos gusta leer.
- Lee un libro corto o varios. Aquí añado que también puede
ser uno de muchas páginas pero de
narración breve o muchas ilustraciones (como esos libros de 365 fábulas para todo
el año o los libros que recopilan montones de cuentos clásicos, que suelen ser
breves y amenos).
14. Recuerda que ningún recurso de los mencionados o que te
den es milagroso, así que no te desesperes si no funciona enseguida, tarde o
temprano saldrás del bache. A veces funciona a la primera y otras tienes que
seguir insistiendo o probar otra cosa.
Piensa que en cualquier caso, si te ha dado un bajón/crisis
lectora es porque tu mente necesita algún tipo de relax y va a necesitar una
pausa para rehacerse (a veces más corta, a veces más larga).
No es el fin ni una rendición: es el principio de una nueva
etapa lectora. Como (no soy fanática de ningún deporte, pero me ha venido a la
mente la metáfora) cuando los jugadores están exhaustos tras la primera parte
del partido (y han ido de mal en peor por el cansancio), les conceden un tiempo
muerto o descanso y entonces, vuelven con energías renovadas y arrasan.
Blogs
Ahora voy a poner algunos blogs con consejos que no he dicho
y también que he dicho (también se repiten de vez en cuando los mismos
consejos, pero es porque funcionan) para que veáis lo que dicen otras personas
y tengáis consejos y puntos de vista a tutiplén y sobre todo para poner los
blogs en los que me he basado para hacer mi lista, que se lleven el
reconocimiento que merecen.
Este primero que pongo me gusta porque muestra las ventajas
que se le pueden sacar al bloqueo (habla de cosas que no he dicho y de cosas
que sí pero mejor dichas):
Estos blogs me han gustado porque ahondan más que otros en
las causas del bloqueo lector, además de darte consejos útiles y variados:
Estos, además de gustarme lo que decían, que era muy bueno,
me gustaba mucho cómo lo presentaban (la parte visual vamos):
Y estos también me parecen igual de buenos, sólo que los he
visto al final, cuando ya llevaba mucho leído, pero también se lo han currado y
también me he basado en ellos (y también tienen además de las ideas dichas,
alguna que no he dicho o que no han dicho otros):
Anécdotas
Y por último, si queréis y no estáis hasta las narices de mí
(yo lo estaría xD), os contaré un poco algunas de mis experiencias con bloqueos/bajones.
El primero, el que os he contado casi al principio, me ocurrió
porque estaba sobrecargada con trabajos, tareas y estudios en general en el
instituto, además de lecturas obligatorias. Llevaba tiempo sin leer por placer,
y llegó un momento en que no quería ni ver los libros (obligados o no).
Y, entonces, como dije, la "cura" me vino por
casualidad, cuando me mandaron dos lecturas obligatorias que me gustaron y me
di cuenta, al saborearlos como una enana (sin devorarlos porque estaba en pleno
bajón), de que había olvidado lo mucho que disfrutaba leyendo. Este bajón sólo cuenta como anécdota, ya que
no tuve que hacer nada especial ni lo busqué, me vino sólo el milagro y encima
no perturbó mis obligaciones de clase. La profesora que nos los mandó por
cierto, a mi parecer tenía muy buen gusto con las lecturas y tareas que nos
mandaba. Lo malo es que también era muy crítica (se ve que tenía complejo de
bruja de Hansel y Gretel: nos das dulces por un lado y nos echas al horno por
el otro).
Lo que sí vi aquella vez (porque me volvió mi ansia lectora
y tenía que darle de comer :P) es que podía leer por lo menos dos o tres libros
en el curso por placer sin desatender mis deberes, leyendo un poquito de vez en
cuando (unos párrafos, unas páginas, un capítulo como mucho, según el día).
Significa leer menos, pero al menos no dejas de leer y no te saturas, por si lo
queréis probar.
También, aunque este no lo considero bajón porque duró unos
minutos, pero para mostraros una idea, una tarde me puse a observar mi
estantería y me dio una especie de mini bajón al comprobar que me había leído
todos los libros que había en ella y no podía en ese momento ir a por más.
Todos… menos uno.
Me percaté de que había un solo libro en mi estantería que
no me había leído. Pero era un libro que llevaba años dejando de lado y no quería leer. Estaba segura de que no me
gustaría. Pero estaba tan desesperada que me dije: "Bueno, no me queda
otro remedio" y lo cogí y empecé a leerlo. Pues bien, ese libro me cautivó
desde la primera página y la segunda y la tercera… hasta el punto que se
convirtió en mi libro favorito cuando lo terminé (luego han venido otros, pero
éste estuvo años ocupando ese lugar en mi mente).
Así que sí, os estoy diciendo que probéis a darle una
oportunidad a libros a los que nunca se la habéis dado. Pero eso sí, una oportunidad
de dos páginas a lo sumo, más ya sería saltarnos el consejo seis. Si después de
dos páginas sigue sin convencerte, déjalo, cuando estás de bajón no es el
momento de dar oportunidades de muchas páginas. Pero si en las primeras páginas
te atrapa… bueno, ponte un vaso de agua al lado para no atragantarte xD (sí, ya
sé que mis chistes son malos xP).
Otra vez en que estaba aburrida con mis lecturas lo que hice
fue cogerme un libro que se me hacía ligero y entretenido, sobre las costumbres
de niños de distintos países (cómo era un día normal en su vida, lo que comían,
cómo se divertían, etc). Era una página por país. Y otra vez cogí un libro
entero de chistes (había de todo, buenísimos, malísimos y más o menos xP).
Ambos libros estaban catalogados como infantiles, pero qué queréis que os diga,
algunos libros infantiles son la repera y muy muy muy aconsejables.
En una ocasión no hace demasiado, por la época en que salía
una trilogía distópica tras otra, llevaba leídas como unas tres trilogías
distópicas seguidas y estaba hasta las narices de ellas (me salía humo por las
orejas) y me dije "voy a leerme un libro autoconclusivo que no tenga nada
que ver con futuros distópicos". Me dije eso, pero al final me cogí otra trilogía
xD (sí, yo también soy del club de los listos, es decir, una pava xD). Eso sí, no era distópica por lo menos, era más bien
tirando a fantástica (nada de futuros postapocalípticos). Y funcionó.
Y volviendo al presente, en el que he dicho que estoy cerca
de un nuevo bajón (aún no, pero casi) lo que me pasa es que llevo varias
lecturas que me han decepcionado. Algunas, porque no se han cumplido mis
expectativas. Otras, porque simplemente no he acertado con el libro, ya que llevo
una época que mezclo libros-expectativa (libros sobre los que he leído y
conozco) y libros-sorpresa (libros que no sabía ni que existían, que he ojeado
en mano y me han llamado la atención). Algunos sí que me han gustado mucho, lo
malo es que luego les han seguido varias decepciones juntas. ¿Qué voy a hacer? Pues
seguir intentándolo a la vez que me doy un respiro de vez en cuando.
Haceros a la idea: cuando os da, os da y lo que mejor podéis
hacer es no agobiaros y tomároslo con calma. Estad seguros: estaréis de nuevo
en racha lectora antes de lo que pensáis. Palabra de zampa-libros.